OPINAMOS: El uso inadecuado del dinero estatal

 El uso inadecuado del dinero estatal

Por: Jorge Chávez Pita

Consultor

Los gastos excesivos que muchas entidades públicas lo han normalizado y muchas de ellas legalizado, nos muestra como cada una de las entidades gubernamentales despilfarran el dinero que se les encarga administrar, contratando servicios y comprando productos que, en la mayoría de los casos, sirven de provecho insaciable para la burocracia enquistada en los estamentos públicos que se sirven de lo que nos es suyo con total desfachatez.

Como gran ejemplo tenemos al Congreso de la República, donde al parecer la plata “no vale nada”, es decir, el ingente presupuesto asignado proveniente del erario nacional, son su mamadera y su sostén familiar sin medida alguna. Los bonos, constantemente entregados, las gratificaciones festivas, los gastos de representación y los viajes en primera clase a países lejanos, entre otras gollerías, son el símbolo real de que en ese ámbito de la mediocridad y la mentira, el dinero nunca sobra, muy por el contrario, siempre falta. 

En los últimos tiempos, algunas entidades subnacionales de la región Lambayeque, como son la Sede Central del Gobierno Regional, las unidades adscritas a esta, como son la Gerencia Regional de Transportes y Comunicaciones, el Proyecto Olmos Tinajones (PEOT) se han visto desenmascaradas cuando sus respectivos portales de transparencia hablan y nos muestran que en todas ellas la plata sobra, y como esta se ha hecho para gastarla, hay que vilipendiarla a libre albedrío y sin control alguno.

Así se tiene como en la gobernación regional se contratan servicios para la atención del almuerzos y refrigerios, organización de eventos, algunos alusivos a celebraciones importantes, incluyendo Coffees Breacks y pertrechos de confort y decoración, merchandising propagandísticos y algo más “para llevar”, al final, los encargados de contratar o comprar lo que no deben, lo hacen pensando que “si hay plata”, entonces hay que gastarla hasta que la caja quede vacía.

En la Gerencia Regional de Transportes y Comunicaciones de Lambayeque, los servicios de Coffee Break abundan, ni que decir de la compra incontenible de productos de merchandising y llaveros incluidos, en este caso, financiados con los recursos que diariamente reciben por la tramitología para adquirir una licencia de conducir, las tasas impositivas que abonan los transportistas para poder realizar sus labores y las multas por no tener sus vehículos en buen estado o no contar con los permisos renovables para circular.

En el PEOT, no podían quedarse atrás. En este claustro de los técnicos ingenieriles y donde a ciertos funcionarios se les paga por divertirse en el campo, los refrigerios y almuerzos cunden, como así también los viajes aéreos trasnochados con propósitos inciertos recurrentes, todo ello suma para mostrar que cuando se quiere gastar la plata que, en este caso, son pagados con recursos directamente recaudados, todo se puede comprar y celebrar hasta con un show artístico como cereza de un apetitoso pastel.